martes, 16 de marzo de 2010

La hora del planeta: video

La Hora del Planeta 2010

La Hora del Planeta 2010 (LHP) es la mayor campaña global a favor de un PLANETA VIVO. Millones de personas y más de 6.000 ciudades del mundo nos uniremos para demostrar que el cambio climático nos importa.

No te quede fuera: 27 de Marzo a las 20,30 h.

Apaga la luz, enciende el planeta!!

miércoles, 3 de marzo de 2010

estosololoarreglamosentretodos.org

Llevamos demasiado tiempo viendo en todas partes lo mal que está todo. Es casi lo único que nos cuentan.
Pero la crisis no solo está ahí fuera, también está en nuestras cabezas. Nos ha hecho perder la confianza, nos ha contagiado el pesimismo, el desánimo.
Esto es lo primero que debemos arreglar, queremos recuperar la confianza.
Tenemos motivos para animarnos. En esta web encontrarás muchos.
Historias de gente como tú y como yo, que se han enfrentado al momento, que demuestran que con ilusión, entrega y compromiso se puede conseguir todo.
Gente que cree en sí misma y lo demuestra a diario desafiando la crisis.
Por ejemplo, ¿sabías que cada mes se crean cinco mil empresas en este país? ¿No te parecen cinco mil poderosas razones para creer?
Queremos que conozcas esas historias, que te inspiren, que te animes, que las compartas, que formen parte de las conversaciones y que consigamos que acaben llegando a los medios de comunicación, a los telediarios, a los editoriales, entre las noticias de lo malo y lo peor.
Tenemos que contagiar la confianza de la misma manera que se ha contagiado el pesimismo.
Porque cuando tú, y tú, y tú, y yo, nos convertimos en nosotros, no hay nada que no podamos arreglar.

martes, 17 de noviembre de 2009

Obama ya no es la esperanza verde

El presidente de EEUU aparca hasta 2010 su agenda medioambiental. Copenhague será tan sólo un paso preliminar hasta la cumbre de México



Barack Obama llegó a la Casa Blanca con el propósito de convertirse en el presidente más verde de Estados Unidos. Independientemente de que lo logre en algún momento de su mandato, está claro que va a tardar algo más de lo previsto en cumplir sus promesas. La recesión, Afganistán y, sobre todo, la reforma sanitaria han aplazado hasta el año que viene las ambiciones medioambientales de Obama, a pesar de que el premio Nobel de la Paz que se le concedió el pasado octubre aseguraba que, gracias a su iniciativa, "EEUU está jugando un papel más constructivo en encarar los grandes desafíos climáticos que afronta el mundo". Y el propio Obama respondió: "No podemos aceptar un mundo acechado por el cambio climático y por eso todos los países deben tomar responsabilidades".
Pero el pasado fin de semana, en Singapur, Obama tuvo que reconocer, junto a otros líderes asiáticos, que de momento la cumbre de Copenhague será tan sólo un paso preliminar en la búsqueda de una solución contra el cambio climático. La reunión de diciembre debía fijar un marco global de recorte de emisiones de dióxido de carbono (CO2) antes de que expire, en 2012, la primera fase del protocolo de Kioto.
"Hubo una evaluación de los líderes de que no era realista esperar que un tratado completo, legalmente vinculante en el ámbito internacional, pudiera ser negociado en tan poco tiempo", dijo Michael Froman, segundo asesor de seguridad nacional de Obama en temas de economía internacional.
En su lugar, la cumbre de Copenhague servirá para crear un acuerdo "políticamente vinculante" que exprese la voluntad de los líderes de seguir adelante. Pero los compromisos específicos se dejarán para otra cumbre posterior, en México, el próximo año.
Otras prioridades
Aunque EEUU no es el principal responsable del fracaso, lo cierto es que en los últimos meses, la voluntad medioambiental de un Washington desbordado por la recesión, las guerras y la reforma del sistema sanitario, ha menguado considerablemente.
Durante la reunión del G-20 de septiembre, los países europeos ya mostraron su malestar por el hecho de que Obama decidiera retrasar sus iniciativas verdes en el Congreso hasta el año que viene, para resolver la mayor reforma del sistema de salud en EEUU en el último medio siglo.
EEUU está desbordado por la recesión, las guerras y la sanidad
Y no es que el Gobierno Obama se haya quedado de brazos cruzados, pero las inercias son difíciles de romper. Muchos congresistas incluso demócratas no quieren dar un paso sin obtener antes garantías de China, mientras muchos en Europa esperan que EEUU lidere la iniciativa. El resultado es la parálisis.
Y sin embargo, las cosas avanzan. El pasado junio, la Cámara de Representantes aprobó en una ajustada votación una histórica ley de protección del clima que obligaría a las empresas estadounidenses a limitar las emisiones de gases de efecto invernadero.
El proyecto (que el Senado no empezará a debatir hasta el año que viene) establece la creación de un sistema conocido como cap and trade, que fija límites máximos y de venta de derechos de emisión de CO2 entre empresas, un sistema similar al que existe en la UE. También prevé una reducción de las emisiones del 17% por debajo del nivel de 2005 para 2020. Asimismo, Obama ha hecho de las energías renovables parte integrante del plan de rescate económico.

Noruega, la paradoja climática

El país de los fiordos presentará en Copenhague una de las apuestas más ambiciosas. El Ártico será una de las regiones más alteradas por el calentamiento global, pero algunos expertos reconocen ventajas colaterales

Un invierno un poco más suave en un clima extremadamente frío, un renacimiento de la agricultura en tierras sepultadas meses enteros por la nieve, o el acercamiento de caladeros pesqueros a las aguas territoriales. Noruega se encuentra entre dos aguas, mascando una inusual paradoja climática. Junto a la Unión Europea y Japón, Noruega integra el grupo de países más ambiciosos en la lucha contra el cambio climático, sin ya grandes esperanzas de ver compromisos en EEUU, China, India o Brasil que salven del fracaso a las negociaciones de la ONU que deben culminar en menos de un mes en Copenhague.

La otra cara del clima sitúa a Noruega, más que como una víctima del calentamiento global o el aumento del nivel del mar, como un país afortunado en medio del desastre. Los investigadores lo explican con la boca pequeña, conscientes de que la opinión pública puede preferir unas temperaturas más suaves a la estabilidad climática imprescindible a miles de kilómetros. "El calentamiento global podría beneficiarnos", reconoce Jan Gunnar Winther, director del Instituto Polar con sede en Tromsø, capital del norte de Noruega que se adentra 350 kilómetros en el Círculo Polar Ártico. "Suavizará las temperaturas, aumentará la biomasa y favorecerá el desarrollo de la agricultura", destaca.

Hartazgo climático
Sin embargo, no es deseable. Así lo asegura Edmond Hansen, uno de los científicos del centro, de vuelta de una expedición de medición del espesor del hielo que desde hace 11 años repite en un mismo lugar entre Groenlandia y el archipiélago de las Svalbard. Cada año encuentra menos hielo y dinero para realizar sus expediciones, que movilizan a un equipo de 30 personas y requieren varios meses previos en busca de fondos. "Estamos frustrados", asegura, "no por la falta de comprensión, sino por la falta de voluntad de la opinión pública para comprender". Hansen se refiere al debate público en su país, pero también a una apatía y hartazgo global sobre el clima. Según él, a diferencia de la confianza en la medicina, "en cuestiones de cambio climático no te sueles fiar de la persona que lleva la bata blanca". "Cualquiera puede comprobar a simple vista la gran pérdida de hielo de los glaciares árticos", añade Winther. "En 800.000 años no se ha producido un aumento de los niveles de CO2 comparable al visto en el último siglo", recalca. Los patrones climáticos a lo largo de la historia del planeta dejan claro, para Winther "y para el 97% de los científicos", que a un aumento de las emisiones de CO2 sigue casi siempre un aumento de la temperatura.

"El calentamiento aumentará la biomasa y mejorará la agricultura"
Más allá de la ciencia, los nuevos vientos del clima no son tan fáciles de interpretar a ras de suelo. Ingvard Lorentzen, de 28 años, es el heredero del negocio pesquero familiar para el que trabajan 80 pescadores de Sommarøy, una isla cercana a Tromsø. "Los últimos tres años han sido los mejores que recuerdo en nuestras capturas de bacalao", explica.

La Comisión Europea, que negocia acuerdos con Oslo, explica que en los últimos años se ha producido un calentamiento de las aguas del mar de Noruega que ha motivado un desplazamiento de las poblaciones de bacalao del Ártico hacia el norte. "Aunque no se puede descartar un rol del cambio climático, puede haber más factores, como la combinación de corrientes marinas en la zona", explican fuentes comunitarias. Lorentzen no ve una especial relación con el cambio climático y recuerda que su familia ha visto otras fluctuaciones a lo largo de siglo y medio de explotación. Si la hay, en todo caso, de momento no le parece un problema tener que ir más al norte, adonde se desplazan los caladeros, siempre que las bodegas vuelvan llenas.

Renos hambrientos
Jan Egil Trasti representa el otro extremo. Se dedica a la venta de carne de reno cerca de Kirkenes, en la fría frontera ruso-noruega y asegura que "desde hace tres años" necesita "almacenar forraje durante el verano para que mis 800 renos tengan qué comer". El cambio climático podría sentenciar a muerte su forma de vida, de gran tradición en Noruega. Los antepasados de Trasti, de etnia sami, se han dedicado a los renos durante siglos y él espera, sin mucha confianza, que uno de sus hijos tome el relevo. De momento, dedicarse a los renos ya le produce más costes y trabajo que hace tan solo unos años. "Desde hace cinco o 10 años los renos acceden con más dificultad a la comida en invierno", asegura. "Donde antes había nieve, ahora hay hielo y en invierno no pueden acceder a la comida", explica.

Un clima suave es bueno para la pesca, pero malo para las granjas de renos
En 2011, Noruega conmemorará las hazañas de dos pioneros de la exploración polar: Fridtjof Nansen, el gran explorador del ártico que se acercó antes que nadie al Polo Norte, y Roal Amundsen, el primer hombre que pisó el Polo Sur. Ambos navegaron a bordo del Fram (Adelante), conservado en Oslo como el barco de madera que ha viajado más al norte y más al sur del planeta. Sus herederos, hoy equipados con los medios más modernos, lamentan la falta de perspectiva y ambición a un mes del final de la negociación. "Y eso teniendo en cuenta que el escenario podría ser todavía peor de lo que predice la ONU", recuerda Winther.

El investigador se refiere a estudios recientes que triplican la velocidad estimada de deshielo en Groenlandia respecto al informe que sirve de base para las negociaciones, elaborado por el Grupo Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) y presentado en 2007. Según los investigadores, si no se actúa con urgencia, el patrimonio explorado por Amundsen y Nansen hace un siglo podría perderse para siempre.

domingo, 8 de noviembre de 2009

CAMBIO CLIMÁTICO: Mirando hacia Copenhague

La reunión convocada por la ONU en Barcelona para preparar la conferencia sobre cambio climático, de diciembre en Copenhague, finalizó este viernes sin muchas esperanzas sobre los resultados que tendrá esa instancia clave para el futuro de la humanidad.
Es que el gobierno estadounidense de Barack Obama apretó el freno en sus señales a favor de sumarse a los acuerdos internacionales sobre cambio climático y con ello disminuyó las esperanzas de un cambio sensible a corto plazo, respecto de la actitud negativa de su predecesor, George W. Bush.
Obama aparece acotado por el Senado, donde tienen fuerte influencia los grandes consorcios transnacionales en campaña para que todo siga igual.
La actitud que tome la delegación oficial de Estados Unidos será crucial para el éxito o el fracaso de la 15 Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP 15), que se desarrollará del 7 al 18 de diciembre en Copenhague tratará de diseñar un tratado para la reducción de las emisiones de gases invernadero, causantes del recalentamiento planetario.
Estados Unidos es el segundo mayor emisor de gases contaminantes del mundo, sólo superado por China últimamente, y no firmó el Protocolo de Kyoto, acordado en esa ciudad japonesa en 1997 y puesto en vigor en 2005 para frenar el ritmo del recalentamiento planetario. Los gases contemplados en ese texto son el dióxido de carbono (CO2), metano, óxido nitroso, hexafluoruro de azufre, hidrofluorocarbonos y perfluorocarbonos.
El acuerdo obliga a los 37 países industrializados que lo ratificaron a reducir sus emisiones de gases invernadero a volúmenes 5,2 por ciento inferiores a los de 1990, en un plazo que acaba en 2012. La reunión de Copenhague fue convocada, precisamente, para convenir un nuevo tratado superador del firmado en Japón.
En Barcelona se hicieron presente delegados de 175 países. Entre ellos se destacaron China y Brasil al manifestar con vigor la necesidad de fortalecer los acuerdos para detener la contaminación del planeta y afrontar el cambio climático.
El representante de China, Su Wei, pidió que los países industrializados se comprometan de verdad en la reducción de sus emisiones para poder avanzar en un acuerdo superar de Kyoto para el periodo 2013-2020.
Algunos delegados plantearon que la crisis económico-financiera global dificulta el cumplimiento de los acuerdos, pero la delegación española afirmó lo contrario y puso como ejemplo lo que está pasando en este país en la actualidad.
El uso más eficiente de la energía y el aumento de la producción de la misma desde fuentes renovables apuntan a que España podrá cumplir con lo acordado en el Protocolo de Kyoto.
Otro problema que oscureció la reunión fue la opinión negativa lanzada informalmente dialogando en los pasillos con un grupo de periodistas por el negociador jefe de la Comisión Europea para la aplicación del Protocolo de Kyoto, Artur Runge-Metzger.
El representante especializado de este organismo ejecutivo de la Unión Europea dijo que es muy probable que en Copenhague no se logre incluir la aplicación de sanciones a los países que incumplan los objetivos asumidos.
La mayoría de los delegados presentes en Barcelona coincidieron en manifestar su previsión de que en Copenhague se logrará un acuerdo "políticamente vinculante", pero no uno que lo sea legalmente, ya que para ello se requerirá más tiempo y negociaciones.
Alicia Montalvo, directora de la Oficina Española de Cambio Climático, calificó de "frustrante" que se esté planteando que en Copenhague no se firmará un tratado debido a la posición de Estados Unidos. Y al preguntársele en rueda de prensa cuándo sería posible firmarlo, si es que se cumplen esos malos augurios, contestó que "lo antes posible", sin precisar tiempos.
Pero Montalvo podrá impulsar esa firma en los próximos meses, ya que cuando España asuma la presidencia temporaria de la Unión Europea, en enero, ella pasará a integrar la troika que dirigirá las negociaciones del bloque.
Sin embargo, pese a estas señales desesperanzadoras, el secretario ejecutivo de la Convención de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, Ivo de Boer, manifestó en rueda de prensa este viernes que todavía es posible un gran acuerdo en Copenhague. Aunque reconoció que hay grandes dudas.
También expresó cierto optimismo acerca de la futura posición de Estados Unidos, pues dijo que cree que el gobierno de Obama finalmente se comprometerá a financiar parte de los programas ambientales de los países del Sur.
Esas naciones en desarrollo, puntualizó, necesitan ayudas por 10.000 millones de dólares anuales para controlar sus emisiones y mejorar sus estrategias de desarrollo sostenible.
Al consultarlo si en Copenhague se logrará algún compromiso importante, contestó que se llegará "a un marco, seguramente político", que incluirá los compromisos de reducción de emisiones de los países desarrollados hasta 2020 y limitaciones en los del Sur.
Puntualizó también que el Protocolo de Kyoto es el único mecanismo legal para combatir el cambio climático y que seguirá siendo útil hasta que la comunidad internacional apruebe otro marco legal.
De forma paralela a la reunión oficial se produjeron manifestaciones de organizaciones no gubernamentales que apoyan y reclaman medidas para garantizar un desarrollo sostenible.
Una de ellas fue Greenpeace, que colocó un lienzo de 600 metros cuadrados sobre el exterior de la histórica catedral de la Sagrada Familia, reclamando a los reunidos que adopten decisiones de manera urgente para combatir el cambio climático.
Una veintena de miembros de Greenpeace colocaron el lienzo con el texto: "Líderes mundiales, tomen la decisión de salvar al mundo", y otro, más pequeño, reclamando "Save the climate-Salvad el clima", en la torre de Antonio Gaudí, diseñada a fines del siglo XIX e inicios del XX.
La organización no gubernamental también criticó explícitamente al presidente del gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, a quien criticaron por su "falta de liderazgo", porque "ni siquiera siendo el anfitrión en Barcelona" ha logrado evitar que su posición fuera "la segunda peor puntuación de todos los presidentes".
Asimismo, Juan López de Uralde, director de Greenpeace España, dio a conocer la llamada Guía de Política Climática, según la cual ese trabajo demuestra que "por ahora, no hay líderes climáticos en los países industrializados".
El gobierno español dejó claro en la reunión que tiene previsto cumplir con el Protocolo de Kyoto, aunque aumentará las emisiones de CO2 hasta 37 por ciento en 2012
Al comenzar este encuentro en Barcelona, los países africanos boicotearon los primeros debates protestando por las débiles promesas de los países industrializados de reducir sus emisiones de CO2.

miércoles, 28 de octubre de 2009

La UE en acción contra el cambio climático

El cambio climático es uno de los mayores desafíos a los que nos enfrentamos. De no producirse una actuación rápida a escala mundial para estabilizar la temperatura de la superficie del planeta —que sigue aumentando— los daños pueden ser catastróficos y sin vuelta atrás.
La UE adoptó en diciembre de 2008 una política integrada de cambio climático y energía, que incluye unos ambiciosos objetivos para 2020. Su intención es llevar a Europa hacia el camino del futuro sostenible, con una economía que genere pocas emisiones de carbono y consuma menos energía. Para lograrlo propone:
reducir un 20% las emisiones de gases de efecto invernadero (30% si se alcanza un acuerdo internacional)
reducir un 20% el consumo de energía mejorando el rendimiento energético
conseguir atender el 20% de nuestras necesidades energéticas con energías renovables.
Lo que está en juego
El calentamiento global es consecuencia de las enormes cantidades de energía que producimos y utilizamos. A medida que crecen las necesidades energéticas, también aumenta nuestra dependencia de los combustibles fósiles (petróleo, gas natural y carbón). Estos combustibles, que producen elevadas emisiones de dióxido de carbono, representan el 80% del consumo actual de energía en la UE.
Los objetivos de la UE para combatir el cambio climático exigen un cambio radical en el consumo y la producción de energía. Por ello, la acción se ocupará de aspectos fundamentales como los mercados del gas y la electricidad, las fuentes de energía, el comportamiento de los consumidores y el aumento de la cooperación internacional.
Retos y oportunidades
La estrategia de cambio climático y energía de la UE coincide con su objetivo de impulsar el crecimiento económico y la creación de empleo. Estar en la vanguardia de la nueva revolución energética creará nuevas empresas y oportunidades de investigación.
El desarrollo de las energías renovables también disminuirá nuestra dependencia de las importaciones de petróleo y gas. La UE se verá así menos afectada por las fluctuaciones de los precios energéticos y la inestabilidad de las cadenas de abastecimiento.
Se está pidiendo a los Gobiernos nacionales que actúen, coordinados por la UE, para garantizar el reparto equitativo del esfuerzo. Los objetivos serán vinculantes, pero tendrán en cuenta las capacidades de cada país.
Actuación a escala mundial
El calentamiento de nuestro planeta exige una actuación a escala mundial. La UE ya ha desempeñado un importante papel en la elaboración de los dos tratados más importantes firmados hasta la fecha: la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 1992 y su Protocolo de Kioto, adoptado en 1997.
Pero con eso no basta. La Unión Europea quiere que el debate internacional sobre el cambio climático siga avanzando y ejerce presión para que se adopte una ambiciosa reducción colectiva del 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero de aquí a 2020.
Los pasos siguientes
La UE espera conseguir un nuevo acuerdo global sobre el cambio climático en la próxima Conferencia sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas, que se celebrará en diciembre de 2009 en Copenhague.
Además, mientras la UE sigue trabajando para alcanzar los objetivos de 2020, también está encarando el reto de reducir las emisiones a la mitad en 2050.

lunes, 26 de octubre de 2009

LA BOLA DE BOLSAS

Esta es una iniciativa más de protesta y ayuda a la lucha contra el cambio climatico
http://www.youtube.com/watch?v=M8iVQ2Z-woY

viernes, 9 de octubre de 2009

La iniciativa "Punto Clima"

Los ciudadanos tienen mucho que decir en la lucha contra el cambio climático. El mundo afronta la recta final de las negociaciones que definirán en Copenhague hacia donde irá el clima hasta el año 2050. Por ese motivo y para facilitar el acceso a la información sobre este asunto de importancia global, la Secretaría de Estado de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente y la fundación Biodiversidad han presentado el boletín PuntoClima.
"No se trata de una web que contenga los documentos relevantes en las negociaciones sobre cambio climático, sino de una preselección de las noticias procedentes de las fuentes de información más importantes, no sólo de la Unión europea, sino también de América Latina y de Estados Unidos", explica Teresa Ribera, secretaria de Estado de Cambio climático.
El boletín será semanal y presentará un resumen informativo sobre los avances de las investigaciones acerca del fenómeno del calentamiento global y las medidas que se toman en este terreno, así como la última hora de las negociaciones multilaterales con el horizonte del acuerdo post-2012.
PuntoClima llegará a los usuarios vía correo electrónico, mediante suscripción gratuita, y será accesible desde la nueva página web de la Fundación Biodiversidad.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

El cambio climático en Google Earth

Conscientes de que una imagen vale más que mil palabras, Google Earth ha desarrollado una herramienta que permite simular cómo va a ser el clima en cualquier punto del planeta en el futuro.Desarrollado a partir de las previsiones del Panel Intergubernamental del Cambio Climático IPCC, nos permite visualizar el incremento de temperatura y los cambios en las precipitaciones previstos según dos escenarios diferentes, uno en el que no se controla el aumento de emisiones de dióxido de carbono y otro en el que sí se frena ese incremento. Asimismo, los usuarios podrán acceder a visitas virtuales narradas sobre aspectos de mitigación y adaptación.
También ha lanzado en Youtube el canal COP15, a través del cual se pueden enviar ideas y preguntas sobre el cambio climático a quienes toman las decisiones en este planeta, a través de una iniciativa llamada Raise Your Voice (eleva tu voz). Los vídeos dejados por los ciudadanos de a pie se emitirán en las pantallas de la conferencia climática en diciembre.
Para promocionar estas herramientas, Google ha contado con el mejor personaje posible en estas lides si de altas esferas se trata: Al Gore. Además, en el canal de Youtube se pueden ver vídeos de otras campañas con vistas a la COP15, como Tck tck tck, Earth Hour 2009 o Seal the deal. Este es el vídeo introductorio del simulador climático presentado por Al Gore.